Barcelona es una ciudad llena de encanto y con una propuesta turística de altura que incluye diferentes manifestaciones culturales, edificios de belleza impresionante, gastronomía típica del mediterráneo y todas las comodidades y el lujo de la vida moderna.
Si estas planificando una visita a esta ciudad cosmopolita, te conviene localizar hoteles en los alrededores de Barcelona que resulten económicos, con todos los servicios complementarios y sobre todo, que cuenten con una ubicación estratégica, para que puedas moverte por la ciudad con comodidad y rapidez.
En un viaje de tres días a Barcelona, hay mucho que podemos ver y hacer. En las siguientes líneas, te proponemos algunos de los lugares más interesantes para visitar y las actividades que no te puedes perder que debes incluir en tu itinerario.
Día 1. Recorre el centro de Barcelona
Lo ideal será que planifiques cada detalle de tu visita con anticipación. Hay hoteles baratos en Poblenou Barcelona, el distrito más moderno e interesante de la ciudad y desde donde puedes emprender el recorrido hacia cualquier punto de la ciudad de manera rápida y cómoda.
Reserva mucho antes de tu llegada para que puedas instalarte y comenzar la aventura turística sin perder demasiado tiempo.
Una vez hayas soltado tu equipaje, prepara un atuendo cómodo y comienza el recorrido por el centro de la ciudad. Si te desplazas desde El Poblenou, puedes tomar el metro, tomar algo en cualquier local o caminar y disfrutar del ambiente de la plaza Catalunya, con sus fuentes y esculturas impresionantes.
Caminar por Las Ramblas, es una experiencia inigualable, pero debes tener un poco de paciencia porque suelen ser rutas bastante caóticas.
Otros puntos de interés en el centro, son el Mercado de la Boquería, El Raval, Portal de L’Angel y el Barrio Gótico.
Día 2. Descubre la Barcelona de Gaudí
El Paseo de Gracia es una calle llena de lujo y con una historia arquitectónica impresionante. Allí, encontrarás La Pedrera, la Casa Batlló y La Sagrada Familia, obras emblemáticas de Antoni Gaudí y que no pueden faltar en tu paso por la ciudad.
También puedes visitar el Parque Güell, un parque público que también hace parte de la obra del arquitecto. Todos estos puntos son imprescindibles para conocer un poco de la obra del artista y el desarrollo de la ciudad con el paso de los años.
Día 3. Relajación
El último día de visita en la ciudad se puede dedicar al descanso y apreciación de la naturaleza. Para esto, programar visitas a los parques con abundantes áreas verdes como el Parque de Montjuic sobre la colina del mismo nombre, dónde nos encontraremos con un hermoso castillo en compañía de una vista sensacional de la ciudad. De hecho, en el parque se ubican algunos de los mejores miradores de Barcelona. Puedes subir caminando o tomar el teleférico hasta la cima.
Parque de la Ciutadella es otro punto natural de la ciudad, donde llama la atención su enorme fuente y la vibrante frescura de la naturaleza, donde podemos descansar y recuperar energías antes de regresar a casa.